Identificando y Transformando Creencias Limitantes
Las creencias pueden ser limitantes o potenciadoras.

Identificando y Transformando Creencias Limitantes sobre el Peso y la Imagen

"Tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, estás en lo cierto."                    Henry Ford

En nuestra búsqueda constante de bienestar y una imagen ideal, a menudo nos vemos atrapados en patrones de pensamiento limitantes que influyen en nuestra relación con el peso, la imagen corporal y la salud. 

Estas creencias, a menudo arraigadas desde la infancia y reforzadas por la sociedad, pueden tener un impacto profundo en nuestra autoestima y comportamientos relacionados con la alimentación y el cuidado personal. 

En este artículo, exploraremos cómo identificar y transformar estas creencias limitantes para lograr una relación más saludable con nuestro cuerpo y una mayor sensación de bienestar.

El Poder de las Creencias en Nuestra Realidad

Las creencias son afirmaciones y pensamientos arraigados sobre nosotros mismos y el mundo que nos rodea. Actúan como filtros a través de los cuales interpretamos nuestras experiencias y dan forma a nuestra percepción del mundo. Las creencias pueden ser limitantes o potenciadoras, y a menudo influyen en nuestras acciones y resultados.

Las creencias limitantes pueden ser barreras invisibles que nos impiden alcanzar nuestros objetivos de pérdida de peso y bienestar. Identificar y desafiar estas creencias es esencial para liberarnos de sus restricciones. 

Reconocer que nuestras creencias son construcciones mentales, se basan en nuestra imaginación, pensamientos del pasado o del futuro, que no son las realidades del aquí y ahora, por la tanto pueden ser modificadas, si nos permitimos abrirnos a nuevas posibilidades y enfoques.

Las Creencias Limitantes y la Imagen Corporal

Las creencias limitantes sobre la imagen corporal pueden manifestarse como afirmaciones negativas y auto-críticas. 

Frases como: "no soy lo suficientemente delgado/a", "mi cuerpo no es aceptable" o "nunca seré lo que la sociedad considera atractivo/a", son algunos ejemplos de creencias que pueden socavar nuestra autoconfianza y afectar nuestra relación con la comida y en consecuencia con nuestra autoestima y amor propio.

Cómo Identificar Creencias Limitantes

Una forma de identificar creencias limitantes es prestar atención a nuestro diálogo interno y las palabras que usamos. 

Frases como "siempre" o "nunca", así como expresiones negativas y autocríticas, pueden indicar la presencia de creencias limitantes. También es útil cuestionar el origen de estas creencias y si están basadas en hechos sólidos o en percepciones distorsionadas.

El Impacto en el Comportamiento

Estas creencias limitantes pueden influir en nuestras elecciones alimentarias y hábitos de ejercicio. 

Si creemos que no somos lo suficientemente buenos tal como somos, es más probable que recurramos a dietas restrictivas o comportamientos extremos para tratar de alcanzar un estándar irreal de belleza.

El Poder de las Creencias Limitantes

Las creencias limitantes son pensamientos arraigados que nos dicen lo que "no podemos hacer" o "no somos capaces de lograr". En el contexto de la pérdida de peso, estas creencias pueden ser especialmente dañinas. 

Veamos algunas de las creencias más comunes que pueden sabotear nuestros esfuerzos para adelgazar:

1. "Mi sobrepeso es genético, todos en mi familia son gordos": Esta creencia puede ser un obstáculo significativo. Si bien hay factores genéticos que influyen en la predisposición al peso, nuestras elecciones y hábitos también desempeñan un papel crucial. No somos prisioneros de nuestros genes; tenemos el poder de cambiar nuestros hábitos y estilo de vida.

2. "Como poco pero todo me engorda": Esta creencia suele estar basada en la desinformación sobre la nutrición. No se trata solo de la cantidad, sino de la calidad de los alimentos que consumimos. Elegir alimentos naturales y nutritivos es clave para un equilibrio saludable.

3. "Es muy difícil perder peso a mi edad / después de la maternidad / con niños en casa / tras la menopausia": Si bien cada etapa de la vida presenta desafíos únicos, no hay una edad límite para buscar un peso saludable. Adaptar nuestros hábitos a las circunstancias cambiantes es esencial, pero eso no significa que sea imposible.

4. "A mí lo que me engorda es el estrés": Si bien el estrés puede influir en nuestras elecciones alimenticias, responsabilizarlo exclusivamente por el aumento de peso es un error. Una dieta equilibrada y estrategias para manejar el estrés pueden coexistir para lograr una vida más saludable.

5. "Los delgados serán más atractivos, pero los gorditos somos más felices y disfrutamos más de la vida": Esta creencia a menudo justifica la inacción y la conformidad. Es importante aceptarse a uno mismo, pero no debemos limitarnos a vivir en una zona de confort. La autoconfianza y la felicidad no deberían depender del peso corporal.

Transformando Creencias Limitantes

El primer paso para transformar creencias limitantes es reconocerlas. Cuestionar su validez y examinar las pruebas que las respaldan es crucial. ¿Qué evidencia tienes para apoyar estas creencias? ¿Qué evidencia contradice estas creencias?

Una vez que se identifican, es posible reemplazar las creencias limitantes por creencias potenciadoras. Por ejemplo, reemplazar la creencia "Nunca podré perder peso después de la maternidad" por "Con dedicación y constancia, puedo lograr una vida saludable y estar en forma después de la maternidad".

Luego, podemos seguir cuestionando la veracidad de otras creencias y buscar evidencia en contra de ellas y sustituir las antiguas afirmaciones negativas, por declaraciones positivas y realistas sobre nosotros mismos.

Cambio de Perspectiva

Un cambio en la perspectiva es fundamental. En lugar de compararnos con estándares inalcanzables, debemos enfocarnos en la salud y el bienestar en lugar de la apariencia externa. 

Reconocer que somos seres únicos con diferentes formas y tamaños nos ayuda a apreciar la diversidad y valorar nuestra individualidad.

Reflexiones Finales

El camino hacia un peso y una imagen corporal saludables comienza en la mente. Consciente o inconscientemente, nuestras creencias dan forma a nuestras acciones. Cambiar nuestras creencias limitantes a creencias potenciadoras es una herramienta poderosa para lograr un cambio duradero en nuestra relación con la comida, la imagen corporal y la salud en general. 

¡La transformación comienza con tu mente abierta y con el coraje para desafiar tus creencias arraigadas que poco te ayudan a ser cada día un poco mejor!

Nuestras creencias sobre el peso y la imagen corporal pueden tener un impacto profundo en nuestra vida. Identificar y transformar creencias limitantes es un paso crucial hacia una relación más saludable con nuestro cuerpo y una mayor confianza en nosotros mismos. Recordemos que nuestras creencias no son hechos inamovibles, sino percepciones que podemos moldear y cambiar para promover nuestro bienestar físico y emocional.

Con cariño,

 Tu amiga Andrea Pérez.



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